Enclavada en el complejo Finca Cortesín, esta residencia ofrece vistas panorámicas a las exuberantes calles y al mar Mediterráneo. La brillante arquitectura de Miguel Olazábal brilla con luz propia, confiriendo a la casa un encanto moderno que personifica el lujo. Ubicada en una amplia parcela, la villa da la bienvenida a sus huéspedes con una cautivadora entrada adornada con un pintoresco lago y jardines meticulosamente cuidados. En dos niveles, los cuatro dormitorios se encuentran en la planta superior, mientras que un quinto dormitorio adicional está convenientemente situado en la planta baja. En el interior, los tonos neutros suaves y los detalles de madera crean una sensación de elegancia y armonía. La planta baja alberga una cocina bien equipada con electrodomésticos Gaggenau y una cómoda sala de estar que conecta sin esfuerzo con el exterior a través de una gran cantidad de puertas correderas de cristal. Los jardines, cuidadosamente diseñados, crean un oasis verde que se funde a la perfección con los espacios interiores, ofreciendo un ambiente único. Una serena piscina complementa el jardín, invitando a su disfrute durante todo el año, mientras que el amplio espacio de las terrazas permite disfrutar de comidas al aire libre y espacios chill-out. Con su privilegiada posición en primera línea, sus impresionantes vistas y su impresionante diseño arquitectónico, esta extraordinaria propiedad personifica el exclusivo estilo de vida de golf de lujo que sólo se encuentra en Finca Cortesín.
